lunes, 29 de agosto de 2011

Silencios cómodos

 En el resplandor del fondo de tu mirada oscura, puedo ver la fluorescencia de tu alma, de tu ser salino, de tu obra viva, de tu amor canino...

   Tu Narciso deja las sobras en tus ojos, que rastreo hasta hallar los silencios cómodos...

   El mundo gira más lento y el tiempo escapa de mis manos... de las tuyas y del momento...  En la grieta de tus labios caigo y ruego no salir...

   Compañía de cuerpos, de-mentes, de sueños, de ti...



Aquí...

... De ahogarme en tus ojos de dulce hiel fluorescente y que me abraces fuerte hasta dejarme sin aire...

   Y si la noche nos encuentra abrazados, correr descalzos por las estrellas, gritar de felicidad y ya sin necesidad de soñar mirar al vacío debajo de nuestros píes brillantes y sonreírle a la muerte, a  la vida, a las horas que pasan que se creen pérdidas.

   Mariposas de tiempo nos asechan y las venas nos siguen sangrando, el pulso sigue corriendo... Igual seguimos muriendo... Y de quererte poco y odiarte a ratos... Y de quererte mucho y esperar sentado...

   Y si el viento nos empuja al sentimiento, puede que debamos ignorarlo y de seguir descalzos, seguir bailando a este ritmo suave, para no perder el paso, ir despacio... Para no amarnos tanto... Y no llegar a odiarnos...

   Y de mirarte tanto y desgastar tú espacio...
   
   Quererte a ratos y morir despacio, en esa pequeña muerte, que se ansía a veces como un demente...

   Y esperarte viva, esperar el ocaso... Saber tenerte, aprender a quererte y a no quererte...

   Decirte tanto, ser esclavos... Decirte mucho, decirte todo, y aún embargo no tanto...




jueves, 25 de agosto de 2011

Café sabor a lápiz

Quisiera beberme el lápiz y así poder hablar de la misma forma que escribo…

   Y nunca comerme un borrador, sólo para tachar y sobreescribir en los errores...

   Café sabor a lápiz….
   Errores sabor a ti…