miércoles, 5 de junio de 2013

En está porquería

 Aquí estoy otra vez en el mismo charco de porquería y lágrimas, de basura y compasiones ridículas que le afectan solo al que se la tira de filósofo en el jardín de la universidad, al pordiosero de la esquina
y al perro sarnoso, fracturado y apunto de ser atropellado en la autopista.

   Aquí estoy con mis dolencias humanas, excesivamente humanas, excesivamente adoloridas porque la soledad y el vacío que da la impotencia asechan a media luz y se tragan las sonrisas y las oportunidades.


   Aquí en estoy en este charco de mierda espesa en el que los intentos se hacen insuficientes, las esperanzas chistes y el alma una colilla de cigarro a la intemperie.